Un caso particular donde la observabilidad se convierte en un punto diferencial son las organizaciones con un alto nivel de dispersión geográfica. Y no existe ningún entorno más disperso geográficamente que el mundo del Retail.
Históricamente, en este mundo ha existido la necesidad de monitorizar lo que ocurre en las tiendas, y, al mismo tiempo, la complejidad asociada a la dispersión geográfica ha limitado que se satisfaciera esta necesidad. Por otro lado, en este mundo existe la necesidad de disponer de información en tiempo real (tanto IT como de negocio) de lo que ocurre en las tiendas.
